Os adjuntamos la carta abierta a la consejera de educación del Gobierno de Aragón que ha redactado nuestra compañera Silvia Mellado y que suscribimos desde Equo Huesca. Es una expresión de la indignación que sentimos todos los defensores de la escuela pública ante las decisiones que se están adoptando desde la consejería en los últimos días y que esperamos que reconsidere por el bien de todos.
Carta a Mª Dolores Serrat
Vemos que las fechas Navideñas le han cundido en la consejería. La semana pasada nos sobresaltó con varias medidas adoptadas y pensamos que se hicieron sin las explicaciones que merecemos toda la ciudadanía. Lejos de creer que son acciones concretas y puntuales, observamos que detrás existe una ideología y tendencia que puede resultar bastante peligrosa para el estado de la educación en nuestra comunidad y por tanto, para nuestro estado general, de ahí el motivo de esta carta.
Recordamos los hechos:
Martes 10/01/12: “La DGA dará ayudas para los tablets (ordenadores) en la concertada”. Pues resulta que con la crisis no hay dinero para seguir con el programa 2.0 en los centros públicos de la comunidad, ni otros muchos programas, ni la formación del profesorado, ni para mantener los Centros de Profesores y Recursos, pero por obra y gracia de no sabemos quién, han aparecido casi un millón de euros que van a ir para seguir pagando con dinero público la enseñanza privada, en particular, el mismo programa para el cual no hay dinero en la pública. Seguramente alguien puede pensar que la privada, perdón, que la concertada, lo necesita más que la enseñanza pública o ¿no es así?
Ya de paso que estaba la prensa por allí aprovechó ese mismo martes para comunicar que “La universidad San jorge impartirá ciencias de la Actividad Física y el deporte”
Parece ser que hay mucha demanda y claro, la ley de oferta y demanda es infalible. ¿qué ocurre con el pacto de descentralización universitaria? ¿Existe tantísima demanda para que la universidad privada San Jorge, también subvencionada con fondos públicos, compita con la universidad pública situada a 50 km de distancia? ¿Por qué no pone otras facultades universitarias que no existen en la actualidad en Aragón? Sin darle muchas vueltas a la cabeza se nos ocurren unas cuantas… Quizá detrás de esta medida, Consejera, quiera ahorrarse unos eurillos en la universidad pública. ¿NO se ha dado cuenta de que la universidad pública es más asequible para mayor número de personas y no como la privada a la que sólo pueden acceder alumnado cuyas familias tengan unos recursos económicos altos? Ahora bien, si lo que usted quiere es que sólo puedan tener estudios universitarios los que puedan pagárselos, pues enhorabuena, va muy bien encaminada.
Miércoles 11/01/12: “Educación impulsará un proyecto piloto para que los padres tengan libertad de elección de los colegios”.
Resulta que la FAPAR además está en contra, y usted, señora consejera, se extraña de que la FAPAR no esté de acuerdo. ¿Acaso ha preguntado qué puede suponer esto? Dudo que se lo tengamos que decir nosotros, pero tenemos ciertas inquietudes que ojalá solvente. ¿Qué pasará cuando alguno de los centros públicos, gracias a la competencia provocada por usted misma, no tenga tanta demanda como plazas? ¿Es posible que se recorten plazas en el profesorado y dotación de algunos centros y se aumente la ratio en los centros más demandados? Eso puede repercutir en la calidad de la enseñanza pública con un mayor ratio por esa ley de oferta y demanda; claro, los centros concertados y privados no sufrirán esto, las tortas se darán entre los centros públicos ¿Es posible que ocurra que los centros menos demandados, que son precisamente los que más recursos necesitan por sus dificultades, reciban menos dotaciones por la ley de oferta y demanda que tanto le gusta? ¿O quizá lo que pretenda usted es precisamente eso, establecer centros gueto y además infradotados? No queremos ser mal pensados, pero creemos que antes de lanzar una medida así y echar la culpa de no querer cambiar a la anterior inercia que llevamos, podría haber pedido alguna opinión. Aunque igual sí que la ha pedido y lo que se esconde no es una medida si no una tendencia muy clara: para los que menos tienen, menos dinero de todos.
Para finalizar me gustaría recordarle unas cuantas cosas que me parece que la semana pasada se le olvidaron. La educación pública favorece la igualdad de oportunidades. Eso de la igualdad de oportunidades, que tanto se repite, posibilita el auténtico ejercicio de la libertad. La escuela prioriza por la sociedad y por el bien común; no es un negocio, «sólo» enseña y educa, no despilfarra, como sí han hecho otros y nos consta que, aunque se puede mejorar, la calidad en la educación pública aragonesa es muy alta en todos sus centros. Usted tiene la obligación como Consejera, de que esa Educación Pública crezca en calidad y está obligada, por su cargo, a garantizar la cohesión social y territorial. Con las medidas que usted toma está acrecentando las diferencias entre los que más tienen y los que menos, entre los que residen en unas zonas y en otras. Además, recuerde que los centros públicos escolarizan el 80% de la población inmigrante, los concertados apenas el 20%, el privado es imperceptible. En el ámbito rural (tan importante en nuestra comunidad) y en los barrios deprimidos, la educación privada es inexistente ¡Cómo va a existir, si sus criterios no son educativos sino económicos! Esperamos, por el bien de todos que recapacite.