Es necesaria más inversión en el tren convencional para convertirlo en el eje de la movilidad sostenible

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha presentado hoy un plan de mejora para Cercanías Madrid. Coincidiendo con esta presentación, reclamamos más inversión para convertir el tren en el eje de la movilidad sostenible, dando prioridad a la red de Cercanías, no solo en Madrid sino en todos los servicios a nivel estatal. Además lanzamos la campaña #NoPierdasElTren para pedir una movilidad más sostenible que tenga como eje fundamental el ferrocarril convencional electrificado.

La formación verde denuncia que desde hace años las políticas de transporte del Estado español no han priorizado el transporte público colectivo. En su lugar ha primado el transporte privado por carretera o incluso la construcción de aeropuertos sin aviones y, en el caso del ferrocarril, han abandonado el tren convencional, apostando únicamente por la alta velocidad.

A pesar del plan anunciado por Fomento, los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018, la partida asignada a la infraestructura del transporte ferroviario ha caído un 50,06% respecto a 2017 -un 80,29% con respecto a 2009-, un duro golpe para el desarrollo del ferrocarril, sobre todo cuando la mayor parte de la inversión se la lleva, nuevamente, la alta velocidad; pese a que ADIF Alta velocidad acumula pérdidas por encima de los 17.000 millones de euros.

Tal como presentó el Ministerio de Hacienda en los PGE2018, en materia de ferrocarril convencional ADIF prevé realizar unas inversiones totales por importe de 848 millones de euros, sin embargo el ADIF Alta Velocidad prevé una partida muy superior, por importe de 2.713 millones de euros.

Para el coportavoz de EQUO y diputado, Juantxo López de Uralde, “La apuesta por el AVE es económicamente suicida: la deuda de Adif asciende ya a 17.900 millones y seguirá creciendo. Ha habido años que el AVE se ha llevado 150 veces más fondos que los trenes de cercanías, a pesar de que cada día viajan 30 veces más pasajeros en cercanías que en AVE. Una muestra clara de en qué tipo de pasajeros están las prioridades del Gobierno. Y eso sin contar las líneas de ferrocarril convencional abandonadas y cerradas, pese a la reclamación social de que vuelvan a ponerse en marcha. A pesar del plan presentado ahora por Fomento tras las múltiples quejas de plataformas y usuarios de Cercanías, los PGE de 2018 muestran nuevamente que el Gobierno vuelve a apostar por el AVE y el transporte por carretera, frente a cercanías y tren convencional, en una disparatada huida hacia delante”

Actualmente la red de cercanías, con algo más de 2.000 km, soporta un tráfico superior a 56 millones de kilómetros recorridos, que supone el 39 % del tráfico de viajeros. Igualmente, los datos muestran que el uso del transporte público en la ciudad está creciendo, y especialmente el número de usuarios que apostaron por utilizar cercanías. Según datos del INE estableciendo una comparativa entre los meses de diciembre de 2016 y 2017 se ha incrementado en más de 2.000 personas, un 4,7%.

A pesar de ello las protestas por averías, el mal estado de infraestructuras, falta de frecuencias o deficiencias en el servicio, no han dejado de aumentar, según la encuesta de valoración de los usuarios publicada por el Ministerio de Fomento; entre 2014 a 2016 las quejas presentadas han aumentado un 14,6%.

Es imprescindible promover una movilidad sostenible, mediante el cambio del actual modelo, que tantos efectos negativos genera sobre la salud de las personas, la contaminación y congestión de las ciudades, el aumento de las emisiones, la dependencia energética del país y el consiguiente déficit de nuestra balanza de pagos.

La desvertebración del territorio, la destrucción de empleo público que se ha llevado a cabo en Renfe y Adif, con hasta 2.000 empleos menos en los últimos 5 años y ha dejado las plantillas con una edad media cercana a los 55 años, son otros de los efectos colaterales de la política ferroviaria, por lo que es urgente un cambio en la movilidad y en la propia red de transporte.

Así mismo, Equo pertenece a la Coordinadora Estatal en Defensa del Ferrocarril Público, Social y Sostenible, cuyo manifiesto fundacional subraya que “El tren no sólo es el medio de transporte que mejor responde a los retos de movilidad de la ciudadanía en la actualidad, sino a medio y largo plazo si tenemos en cuenta la necesidad de mitigar el cambio climático y la evolución de la energía debido al agotamiento de los combustibles fósiles. Por eso, es inexcusable la promoción y gestión pública de un tren eficiente, sostenible, accesible, asequible, seguro y de calidad.”

En este sentido, la también coportavoz de EQUO, Marta Santos, defiende que la decisión de abrir un servicio no debe depender de la rentabilidad económica, “Si fuera así no existiría el AVE, pero sin embargo si se aplica este criterio al tren convencional. Dependiendo de las políticas tarifarias, las cercanías o la media distancia se cubriría buena parte del coste operativo de estos servicios. Nada que ver con la infrautilización y las pérdidas económicas del AVE. Sería de una ayuda enorme mejorar los corredores de cercanías, para contribuir en la mejora de la comunicación, y actuaría como eje revitalizador de los pueblos que atraviesa y en los que el corredor tendría parada”.