El Día del Orgullo Friki: Imaginación al poder, también para otra política

Hoy, conmemorando el estreno de “Una nueva esperanza” (Star Wars), en Equo queremos reivindicar y compartir nuestro orgullo de disfrutar haciendo lo que nos apasiona, compartiendo también con el Día del Orgullo Friki su esencia creativa. En nuestro caso esa creatividad está canalizada hacia la acción política y reivindicativa, y pensamos que el de hoy es un día para sensibilizar en la alternativa y el pensamiento lateral, necesarias más que nunca para replantear el estado de las cosas y la búsqueda de un futuro mejor. Hoy, deseamos llamar a la expresión y crítica del mundo a través de su vía creativa, aportando contenidos de inherentes lecturas filosófico-políticas.

Hoy necesitamos otra política, y sólo la imaginación va a proporcionárnosla.

La política como vía de expresión cultural y contracultural. Manifiesto de no-gobierno

Las ideologías no han muerto, vivimos tiempos en que la homogeneización y la desestructuración de las libertades y sus derechos fundamentales mediante el discurso de la austeridad son norma. Podríamos hacer símiles con la mayor parte de la iconografía friki y contracultural: el Imperio Intergaláctico de Star Wars, el Gran Hermano de Orwell, la Roma de Goscini y Uderzo… en definitiva es hora de la Alianza Rebelde, de escapar de la policía del Pensamiento y de reencontrarse con Astérix y Obélix; de plantear un escenario con unas herramientas diferentes, y reivindicar con orgullo friki la acción política como herramienta creativa con que imaginar y llevar a cabo esos objetivos, como kriptonita verde para un extraterrestre paternalista incapaz de entender que la Humanidad ha de hacerse cargo de su propio destino.
Necesitamos proponer un sistema alternativo, dejando las vías reformistas y negacionistas que sólo redefinen el límite del sistema que las hace imposibles y por lo tanto, lo conforma como realidad absoluta.
El mañana está aún por imaginar.

Postdatas (friki)
1. Esta nota tiene 1977 caracteres, el año de estreno de “Una nueva esperanza”.
2. La última referencia al superhéroe por antonomasia es el enfoque principal de “Superman: Hijo Rojo”, quizás la versión más crítica al Hombre de Acero en la que la nave espacial en la que viaja Superman aterriza en una granja colectiva de Ucrania (URRSS) y no en Kansas. Sin embargo, nos gusta más el verde kriptonita.
3. Para más referencias sociopolíticas y filosóficas de la iconografía friki, recomendamos Los superhéroes y la filosofía (Tom Morries, Blackie Books 2010).

En los medios:

Dicen que una toalla es el objeto de mayor utilidad que puede poseer un autoestopista interestelar. En parte, tiene un gran valor práctico: uno puede envolverse en ella para calentarse mientras viaja por las lunas frías de jaglan Beta; se puede tumbar uno en ella en las refulgentes playas de arena marmórea de Santraginus V, mientras aspira los vapores del mar embriagador; se puede uno tapar con ella mientras duerme bajo las estrellas que arrojan un brillo tan purpúreo sobre el desierto de Kakrafun; se puede usar como vela en una balsa diminuta para navegar por el profundo y lento río Moth; mojada, se puede emplear en la lucha cuerpo a cuerpo; envuelta alrededor de la cabeza, sirve para protegerse de las emanaciones nocivas o para evitar la mirada de la Voraz Bestia Bugblatter de Traal (animal sorprendentemente estúpido, supone que si uno no puede verlo, él tampoco lo ve a uno; es tonto como un cepillo, pero voraz, muy voraz); se puede agitar la toalla en situaciones de peligro como señal de emergencia, y, por supuesto, se puede secar uno con ella si es que aún está lo suficientemente limpia.
Y lo que es más importante: una toalla tiene un enorme valor psicológico. Por alguna razón, si un estraj (estraj: no autoestopista) descubre que un autoestopista lleva su toalla consigo, automáticamente supondrá que también está en posesión de cepillo de dientes, toallita para lavarse la cara, jabón, lata de galletas, frasca, brújula, mapa, rollo de cordel, rociador contra los mosquitos, ropa de lluvia, traje espacial, etc. Además, el estraj prestará con mucho gusto al autoestopista cualquiera de dichos artículos o una docena más que el autoestopista haya «perdido» por accidente. Lo que el estraj pensará, es que cualquier hombre que haga autoestop a todo lo largo y ancho de la galaxia, pasando calamidades, divirtiéndose en los barrios bajos, luchando contra adversidades tremendas, saliendo sano y salvo de todo ello, y sabiendo todavía dónde está su toalla, es sin duda un hombre a tener en cuenta.

Guía del autoestopista galáctico de Douglas Adams